En el proceso de diseño y desarrollo de cascos, tanto destinados a la protección en motociclismo y en deporte como en el caso de equipos de protección individual para el ámbito laboral, la incorporación de criterios relacionados con la seguridad se realiza de forma sistematizada por ser productos sujetos al cumplimiento de directivas europeas y a la correspondiente homologación para poder ser comercializados. Sin embargo, los aspectos relacionados con el confort y la adaptación al usuario no han sido aún objeto de estudio en profundidad. El objetivo de este proyecto consistió en la generación de criterios de diseño de la superficie interior del casco para conseguir un ajuste adecuado, considerando las características morfológicas de la población a la que va destinado. Para conseguirlo, se ha puesto a punto una metodología de obtención de medidas antropométricas de la cabeza y se ha analizado la interacción cabeza-casco a través de la distribución de presiones entre ambos. Además, se han estudiado datos de carácter subjetivo como la valoración del ajuste, las molestias por zonas y el confort global.